Nada se compara, ni se comparará con aquello que no se puede medir: el bienestar generado, el ambiente familiar, las inquietudes sembradas y la participación de cada uno de los que aquí se han dado cita. No hay manera de medir aquello que enriquece el alma. Y hoy, como seres humanos, estoy seguro, somos más conscientes y sensibles al arte después de esta experiencia llamada FAOT

Mario Welfo Álvarez Beltrán
Director General del Instituto Sonorense de Cultura

 

FAOT 2019 MEMORIA